El Pachón Navarro es una de las razas de perros de caza más antiguas y emblemáticas de la península ibérica.
Conocido por su inconfundible nariz partida —que le ha dado fama internacional—, este perro no solo es un icono cultural de Navarra y el norte de España, sino también un aliado eficaz en la caza menor, especialmente en terrenos abruptos y con especies de pluma.
Orígenes e historia
El Pachón Navarro aparece documentado ya en el siglo XVI, en crónicas de caza de la nobleza española. Se cree que desciende de los antiguos sabuesos ibéricos cruzados con perros de muestra llegados de Francia y Flandes, lo que explicaría su parecido con el Braco Francés y el Pointer.
Su apogeo se vivió entre los siglos XIX y principios del XX, cuando era habitual en las monterías y jornadas de perdiz en el norte peninsular. La Guerra Civil y la aparición de razas foráneas casi provocan su desaparición, pero gracias al esfuerzo de criadores locales y de la Asociación Nacional del Pachón Navarro, la raza se ha recuperado y hoy está reconocida por la Real Sociedad Canina de España (RSCE).
Clasificación
- Grupo FCI: No reconocido oficialmente por la FCI, aunque en España está registrado en el Grupo 7 (Perros de muestra).
- Función principal: perro de muestra polivalente, especializado en la caza menor de pluma.
- Ámbito geográfico: originario de Navarra, pero presente en toda España gracias a criadores especializados.
Morfología y características físicas
- Tamaño: macho 48–57 cm; hembra 47–56 cm a la cruz.
- Peso: entre 20 y 30 kg.
- Cabeza: fuerte, con stop poco marcado; labios algo caídos.
- Nariz: característica trufa hendida o partida, que no es un defecto, sino un rasgo propio.
- Orejas: largas, planas y caídas, similares a las del braco.
- Cuerpo: robusto, compacto y con pecho profundo.
- Pelaje: corto, liso y denso, con colores que van desde el blanco con manchas naranjas, marrones o negras, hasta el ruano.
Movimiento y aptitudes
El Pachón Navarro es un perro de movimiento pausado pero constante, ideal para la caza en monte bajo, bosques y terrenos irregulares. No es tan rápido como un pointer inglés, pero compensa con resistencia y capacidad de rastreo minucioso, lo que le convierte en un perro muy apreciado para la caza de perdiz, codorniz y becada.
Temperamento y comportamiento
- Equilibrado y dócil: fácil de manejar en el campo y en casa.
- Instinto cazador innato: excelente olfato y gran fijación en la muestra.
- Sociable: se adapta bien a la convivencia familiar, aunque necesita ejercicio diario.
- Persistente: no se rinde fácilmente, lo que le hace especialmente útil en jornadas largas.
Adiestramiento
El Pachón Navarro es un perro inteligente y receptivo, aunque algo testarudo en ocasiones. Responde mejor a un adiestramiento paciente y positivo, con sesiones cortas y refuerzos constantes.
Se recomienda comenzar desde cachorro con la obediencia básica y luego trabajar la muestra y el cobro en campo. Su capacidad de rastreo y concentración facilita el aprendizaje, aunque conviene reforzar el control en distancias largas.
Salud
Es una raza generalmente sana y rústica, adaptada a climas variados. Sin embargo, presenta cierta predisposición a:
- Displasia de cadera (como muchos perros de muestra).
- Otitis por la forma de sus orejas, si no se cuidan adecuadamente.
- Problemas oculares menores en ejemplares de edad avanzada.
La nariz partida no supone un problema de salud; al contrario, algunos expertos consideran que puede mejorar la capacidad olfativa.
Puntos fuertes en caza
- Olfato privilegiado, reforzado por la peculiar trufa hendida.
- Capacidad de rastreo lento y meticuloso, ideal para becadas y perdices en monte bajo.
- Gran resistencia física.
- Perro equilibrado, fácil de manejar y muy versátil.
Puntos débiles en caza
- Menos rápido que razas como el Pointer o el Braco Alemán.
- Puede ser algo terco en el adiestramiento si no se usa una metodología adecuada.
- Necesita bastante ejercicio para evitar el sobrepeso y mantener su condición física.
Curiosidades
- El Pachón Navarro es conocido internacionalmente como « Double-nosed Spanish Pointer », y ha sido objeto de estudios científicos sobre su capacidad olfativa.
- Se estima que apenas existen unos pocos miles de ejemplares en todo el mundo, lo que lo convierte en una raza rara y exclusiva.
- Fue declarado raza autóctona en peligro de extinción, lo que refuerza el valor de su cría y preservación.
El Pachón Navarro es mucho más que un perro de caza: es un símbolo de tradición y un ejemplo de cómo la pasión cinegética ha sabido preservar una raza única. Su combinación de olfato excepcional, carácter equilibrado y resistencia le convierten en un aliado indispensable para cazadores exigentes, especialmente en la caza menor de pluma en terrenos difíciles.
Cazar con un Pachón Navarro no solo es disfrutar de un perro eficaz, sino también contribuir a mantener viva una parte de la historia cinegética española.